El trabajo de las empresas no se hace solo: a veces lo olvidamos. Los productos y servicios con los cuales nuestra empresas hacen dinero son resultado del esfuerzo ordenado de las personas que laboran en ellas.
Laszlo Bock nos recuerda una y mil veces la importancia del capital humano para el éxito empresarial, mostrándonos la forma en la cual organizaciones han triunfado o fracasado como consecuencia de las estrategias implementadas para la gestión de los equipos de trabajo.
Las páginas de La nueva fórmula del trabajo parecerían enseñarnos un nuevo idioma, o dibujarnos un mundo donde las reglas son completamente sorpresivas. No se distrae del uso permanente de conceptos de liderazgo y cultural de bienestar, pero sin mencionarlos los aborda desde tal cantidad de ángulos que termina habilitando al lector a obtener una visión integral de ellos.
Algunos de los planteamientos propuestos son disruptivos. Otros, definitivamente contraintuitivos. Pero todos ellos terminan siendo perfectamente razonables tras ofrecerles un momento de reflexión y comprender la sutileza de sus fundamentos.
La nueva fórmula del trabajo no es un libro sobre los secretos de capital humano de Google. O al menos no solo es eso. Es un tratado del liderazgo adaptado a la realidad de hoy, la cual sin notarlo es casi opuesta a la de ayer. La claridad de la presentación de sus conceptos en una útil ayuda para estructurar aquellas ideas que no terminábamos por determinar la mejor forma de ordenar